La Nueva Equestria
-Por DanLand 1939-
Capitulo Dos: Veinticinco Años Después:
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Capitulo Dos: Veinticinco Años Después:
En los pasillos de metal resonaban la cansada caminata de un poni, a juzgar por el ruido que estaba haciendo, este tenía prisa, las estrechas paredes de metal de los pasillos asfixiaban al pobre poni, pero si no llegaba a tiempo, su única oportunidad de ser el primer poni, que los humanos quitan de la esclavitud, se desvanecería y probablemente sería fusilado.
Darklight, un alicornio blanco melena y colas negras con las puntas blancas, cortadas a un estilo militar, ojos de un color verde muy opaco, la cutie mark se borro por el constante castigo de los latigazos, solo fue un año, pero fue suficiente para borrarle su marca de vida.
El joven tiene veinticinco años de edad, es muy temperamental, trabajador, inteligente, experto en el combate y la magia, todo gracias a las enseñanzas de sus padres.
Vestido con una camisa blanca, encima un chaleco rojo, portando un pantalón, diseñado exclusivamente para los ponis.
A los humanos les daba pudor verlos desnudos.
Sus alas destrozadas por la furia humana, eran más inútiles que intentar pedir piedad a un ser humano.
Cruzo en largo y estrecho pasillo, a paso veloz, para evitar chocar con los humanos que iban pasando, raras veces, llevaban sus ponis al centro de mandos de New Ponyville, solamente para sustituirlos por ponis mejores o para dar una queja de ellos.
los miraba con tristeza y rabia, pero para muchos ponis, preferían que los compraran que a quedarse con los militares, cuanta razón tenían.
Llegó frente a la puerta, que será su nueva vida, tocó la pesada puerta y espero respuesta.
--Pase-- dijo una dulce voz, que si no la cantaba un ángel, entonces sus oídos, también estaban fallándole
Darklight cruzo la puerta, la cual esta se deslizaba automáticamente, dando paso al poni, el observo la habitación, y miro a su recibidora.
Era una poni color azul celeste, como el bello azulejo que adornaba la ventana del gabinete, obviamente, el humano que trabaja ahí, la tiene de esclava, no debía tener entre diecisiete u dieciocho años, su bella melena lila, se extendía hasta donde le permitía las leyes, los hombros, esta unicornio se quedo muda, se limito a solamente mirar los papeles. Ella portaba su uniforme, muy similar a los uniformes de los humanos que trabajaban en la oficina, camisa blanca, casaca negra y pantalón negro.
--Gracias-- dijo Darkligth, incomodo por el silencio, quería saber más de ella-- ¿Cuál es su nombre...?--
--Animet, esclava doscientos cuatro, de la prisión del sur-- dijo nerviosa, ella recordaba ese horrible lugar, tenia solamente catorce años cuando se la llevaron a trabajar en los campos, todavía su madre muere enferma frente a sus ojos, mientras que su padre, desapareció sin dejar rastro.
--Animet, esclava doscientos cuatro, de la prisión del sur-- dijo nerviosa, ella recordaba ese horrible lugar, tenia solamente catorce años cuando se la llevaron a trabajar en los campos, todavía su madre muere enferma frente a sus ojos, mientras que su padre, desapareció sin dejar rastro.
--Que bello nombre, Animet-- menciono para calmar a la pobre unicornio, él noto algo de desesperación luego de haber mencionado lo de la prisión, todo poni, era lo único que recordaban-- mi nombre es Darklight, prisión Ponyville--
--Hola-- dijo completamente nerviosa, en eso entra un humano, portando una ropa se-mi casual, este se sentó en un sillón que estaba ahí y le dio una seña a Darlight de sentarse en frente.
Darklight, negó con cortesía y agradeció la oferta, los humanos odiaban que los ponis se sienten en los sillones, y más de una vez, Darklight, había caído en esa misma trampa... ya no.
--¿A qué se debe si visita?-- pregunto el militar.
--bueno... yo... --tragó saliva, espero a que el nudo se fuera deslizando hasta que creyó que se le fue prosiguió-- mi nombre es Darklight, prisionero número mil quinientos sesenta y nueve, de la batalla de Esperanza, vine a trabajar como técnico, soy experto en muchas cosas incluyendo la tecnología--
El humano lo miro, y de una forma insolente le pregunto:
--¿Y tu amo?... animalesco-- Darklight se sintio ofendido.
--Me dejo en libertad hace dos meses-- respondió mientras de un bolsillo de su chaleco sacaba la orden firmada. El humano lo leyó, lo miro fríamente.
--Bienvenido, iniciaras hoy en la tarde, tu paga sera de un bit al día, y iniciaras siendo el esclavo de la empresa-- Dijo finalmente convencido el humano. Un alicornio puede ser igual de útil como un poni de pruebas
Darklight se sintió feliz de ser el primer poni en tener sueldo, salio del edificio, lo miro desde afuera, un edificio tipo fuerte militar, el castillo que antes estaba allí en la guerra, quedo destruido, pero en su lugar se alzo un fuerte, el centro de mandos humano, único lugar donde esta el portal, donde esta su fuente de energía.
Darklight se le vino a la mente la muerte de su padre, siendo atravesado por espadas brillantes, dejándolo morir de sangrado, él lo recuerda muy bien, para el solo paso un año.
Regreso a la casa de su amo, a pesar de la libertad impuesta, él seguía viviendo en casa del amo. Todavía no sabe donde quedo su madre ni las crías que el conoció durante la guerra, para el todos estaban muertos.
La única foto de su madre era de hace más de quince años, una simple imagen, con tres ponis en aquella hoja, Darklight, a su lado una alicornio, su madre Twilight Sparkle, y al otro un pegaso, su padre Flash Sentry.
